Discurso de Saray Rodríguez Suárez en el diálogo organizado por el PSOE Lanzarote titulado "Ganarse Otra Igualdad"
Buenas
tardes y muchas gracias a gente como ustedes por querer compartir
este rato del viernes hablando de igualdad.
Por
supuesto, agradecer al PARTIDO SOCIALISTA el hecho de que haya
dedicado tiempo y esfuerzos en organizar esta conferencia política y
me haya invitado.
Aunque
de manera protocolaria siempre se empieza por los agradecimientos me
gustaría ir más allá, y que este agradecimiento roce incluso lo
personal porque no es fácil tomarse el atrevimiento de participar en
una conferencia como ésta y tomarse el atrevimiento de decir “pues
yo también”.
Cuando
mi compañera Eva de Anta me comunicó que contaba con mi
participación para el trabajo previo en la Mesa de Igualdad no lo
dudé, desde un primer momento me tuvo a su disposición. Cosa bien
distinta fue cuando me propuso participar en la Conferencia.
Debo confesar que mi
primera respuesta fue NO. La segunda también.
Es
por esto que mi agradecimiento no solo es protocolario sino también
personal e incluso el MOTIVO DE MI DISCURSO.
Si
no es por Vicenta Monge, Presidenta de la Asociación Tiemar, a la
cual debo disculpar porque su ausencia hoy es involuntaria por
motivos personales y compañeras de partido como Eva de Anta, Ana
Curbelo y Alicia Martín, no hubiera reunido el valor suficiente para
estar hoy en esta Conferencia.
Gracias
compañeras por hacerme saber que tengo vuestra total y absoluta
confianza para representar a las mujeres socialistas y sobre todo,
feministas sin ningún tipo de pudor ni complejos les estaré
eternamente agradecida por la magnífica muestra de SORORIDAD que
habéis hecho conmigo y el sentimiento de orgullo que me habéis
transmitido, es totalmente recíproco.
La
Sororidad entre mujeres, que no Solidaridad, es básica y fundamental
para la igualdad. Cuando se habla de SORORIDAD, término no
reconocido por la Real Academia de la Lengua Española (RAE); lo cual
no es de extrañar porque, si
tenemos en cuenta la composición de su pleno por 37 hombres y 3
mujeres y que ha manifestado públicamente que con el lenguaje no
sexista “no se podría hablar”, aspecto básico y fundamental
para visibilizar a la mujer, es lógico que no hayan introducido aún
este término y otros tantos como hembrismo, antónimo de machismo y
que ayudarían a limpiar de connotaciones negativas al término
FEMINISMO. En cambio, la RAE no ha tenido ningún tipo de reparo al
incluir recientemente términos como canalillo o culamen, dirigidos
principalmente a describir físicamente a una mujer desde un punto de
vista sexista y cosificado.
Si
decimos SORORIDAD estamos
hablando de cualquier acción que implica hermandad, reconocimiento y
apoyo entre mujeres.
Mis
compañeras en un maravilloso acto de hermandad, reconocieron mi
valía. Sin duda una muestra de apoyo entre mujeres, de la cual soy
protagonista y beneficiada. La SORORIDAD da resultados y nos puede
ayudar a que la igualdad sea efectiva y real gracias al
empoderamiento de la mujer apoyada siempre por otras mujeres.
Es
curioso que el movimiento
feminista cree términos como el de
SORORIDAD que demuestran
e impulsan la fraternidad femenina para construir lazos de amistad y
complicidad para trabajar por el feminismo
pero en cambio, todavía hoy se insiste en mostrar una imagen de las
mujeres como un colectivo incapaz de trabajar y convivir, calificando
las relaciones entre mujeres como un tormento de continuas tiranteces
y muy relacionado con el dicho "Mujeres juntas, ni difuntas".
De
nuevo compañeras gracias por hacer gala de la sororidad, son
pequeños pasos que contribuyen al avance social desde el feminismo.
Esta
Conferencia se ha organizado para hablar de Igualdad, recalcar su
importancia para el futuro y no olvidar que la consecución de la
misma atañe a la mitad de la población global. Lamentablemente, se
está extendiendo el término IGUALISTA por quienes se dicen luchar
por conseguir la igualdad efectiva entre hombres y mujeres.
La
evolución de la demonización
del término FEMINISTA ha pasado de un “yo no soy feminista pero
tampoco machista” a “yo no soy feminista soy igualista”.
Siempre
que surgía el debate entre quienes se niegan a utilizar el término
feminista en pro del igualista me condenaba. Si FEMINISMO es el
conjunto
de ideologías
y movimientos políticos,
culturales
y económicos
que tienen como objetivo la igualdad real y efectiva de derechos
entre mujeres
y hombres ¿Por qué se niegan a utilizar el término e inventan uno
nuevo? ¿Ignorancia, mala fe, influencias de la sociedad patriarcal?
En
cualquier caso y gracias a un artículo sobre FEMEN de Montserrat
Barderi cambié por completo de parecer. En este artículo Montserrat
explica que FEMEN
es un movimiento en femenino (se niegan llamarse a sí mismas
feministas) cuyas acciones de protesta consisten en hacer topless y
pintarse eslóganes en el cuerpo, cosa que las ha hecho famosas en
todo el mundo). Según
una de sus fundadoras, Alexandra Shevchenko,
este movimiento reivindica una mujer “femenina”,
con tacones y minifalda, en vez de una mujer “masculina”
y resentida, imagen tópica de la feminista.
Según
Montserrat es evidente que el patriarcado ha hecho un buen trabajo si
aún hay mujeres que asocian feminismo con marimachos amargadas que
matarían a los hombres y que se dejan crecer barbas. Para ella, no
hay un solo tipo de mujer, tampoco existe un único feminismo, se
trata de un movimiento fuerte, vivo, dinámico y necesario.
Debatimos, discutimos y esto es parte de nuestra fuerza y no de
nuestra debilidad. Opinión que comparto en todos sus aspectos.
Acaba
Montserrat esperando que llegue el día en que desde FEMEN se abra el
debate y descubrirán que la representación social del cuerpo de la
mujer no es tan ingenua ni gratuita. Que no solo de la mirada y el
placer masculino vive el cuerpo femenino, criticaran la forma en que
los medios los representen… celebrando que existan, que empiecen,
que trabajen en pro de la igualdad y agradeciendo a Femen sus
protestas en contra de la ejecución de una mujer por adulterio en
Irán, contra el turismo sexual, a favor de los derechos, de la
igualdad y la justicia.
Me
sumo a la bienvenida de Monsterrat a Femen y también le doy la
bienvenida a los y las igualistas que luchan por la igualdad, por
crear una sociedad más libre y justa. Por mi parte, yo
me seguiré declarando orgullosa y necesaria feminista.
Saray Rodríguez Suárez
Concejala Socialista en el Ayuntamiento de Tías.




